Las
Asambleas Departamentales: ¿AÚN SIRVEN?
David Jiménez[1]
El columnista Francisco
Gutiérrez Sanín (El Espectador, Diciembre 6 de 2012) reabrió el debate sobre el
papel y función de las Asambleas Departamentales en la democracia
representativa colombiana. Él señala que dichos cuerpos de representación se
encuentran en el cuarto de San Alejo del sistema político, y que a diferencia
del congreso y los concejos; las Asambleas no hacen ruido ni estorban como si
lo hacen los primeros.
Al cuidado de San Alejo sí,
esto es, de la reproducción monda y lironda del sistema clientelista, en tanto
obran como bisagra que articula la clientela municipal al sistema electoral
nacional. Pero, esta hipótesis la recorreré en otro escrito. Fijemos la
atención en otro problema más inmediato y aparente.
¿El
ruido sin ó con sentido?
Las Asambleas
Departamentales, tiene su régimen en el Decreto 1222 de 1986, que ha sufrido
cambios con la constitución de 1991, la ley 617 de 2000 y las reformas
políticas de 2003 y 2009; pero no hacen ruido ni en la prensa nacional, solo en
2012 la Asamblea Departamental de Antioquia estuvo en radio y prensa nacional
porque un Diputado no estaba de acuerdo con ejecutar inversión al Departamento
del Choco por decir "La plata que
uno le mete al Chocó es como meterle perfume a un bollo"; nos dimos
cuenta que existen las Asambleas en el sistema político por un registro en la
prensa y noticias a nivel nacional.
Sin embargo, las Asambleas
al igual que los concejos, todas las iniciativas que comprendan gasto público,
son exclusivas del Ejecutivo, a diferencia de un congresista que puede radicar
un proyecto de ley para conmemorar la fundación de un Municipio y obligar a
inversiones con recursos del presupuesto general de la Nación, un diputado no
podría hacerlo sin contar con el aval de Gobernador. Además, los gastos de las
Asambleas se encuentran regulados por la ley 617 de 2000, de 32 que hay en el
país, 17 incumplen esta norma de ajuste de fiscal.
Así mismo, los concejos
Municipales tienen competencia en temas que afectan a los ciudadanos, por eso
hacen ruido, cuando aprueban el plan de ordenamiento territorial, los usos del
suelo, el estatuto tributario, por mencionar. Solo basta comparar la imagen del
Concejo de Medellín y la Asamblea Departamental de Antioquia ¿Quién sesiona más? ¿Cuál hace más debates de control político? Y ¿Cuál
estorba y hace más ruido?.
Cuando se expide una
Ordenanza en la Asamblea Departamental, no son vinculantes jurídicamente con
los municipios, a no ser que una ley obligue, en un Asamblea se puede aprobar
una determinada política pública y en los concejos una con el mismo nombre pero
con enfoque y financiación diferente.
Por otro lado, con el
proceso de descentralización, los municipios administran y prestan los
servicios de salud, servicios públicos, deporte, cultura, vivienda y
educativos; el Departamento es solo un “intermediario” entre el nivel central,
en eso que hacen las Asambleas, no se sienten.
Las
propuestas de reforma
El Gobierno Pastrana tenía
una propuesta de convocar a referendo en el año 2000, en la agenda estaba la “supresión de las asambleas departamentales
y creación de consejos departamentales”, aunque no logró su aprobación en
el congreso, lo hizo con la ley 617 de 2000, dónde las Asambleas tienen un
presupuesto escaso para pagar los sueldos de diputados y sus unidades de apoyo,
y muchas Asambleas quedan a voluntad del Gobernador de turno para que les
suministre seguridad privada, dotación
de computadores, servicio de aseo interno
y hasta para pagar los tintos.
Los Consejos
Departamentales, elegidos por concejales de acuerdo a la división geográfica de
cada Departamento podrían hacer más ruido y estorbar más que la estructura
actual de las Asambleas; ó para los
tecnócratas que se preocupan por el ajuste fiscal y la eficiencia, podrían
proponer la conservación de las Asambleas en su coma profundo como dice
Gutiérrez Sanín, donde el congreso apruebe la reducción de salarios de los
Diputados que solo ganan cuando sesionan
ordinariamente (Marzo,Abril,Junio,Julio,Octubre y Noviembre) o
extraordinariamente y cumplan con su ajuste fiscal que nunca le exigen al
Congreso.
PD: Una vez estaba con un
Diputado, un periodista de un medio regional le dijo que lo quería entrevistar
para que explicará los resultados del periodo de sesiones, el diputado le
respondió con una risa: “Que voy a decir
si no hicimos nada”, el periodista le dijo: así sea que diga cualquier cosita.
[1]
Politólogo Unal. Participante del Grupo Presidencialismo y Participación de la
Universidad Nacional de Colombia. E-mail: presid.y.partic@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario