David Jiménez[1]
El Partido Social de Unidad
Nacional (Partido de la U) fue fundado por Juan Manuel Santos y Luis Guillermo
Vélez Trujillo en 2006, inspirados en el Uribismo de la época, alimentado por la salida de muchos militantes del oficialismo
liberal. A su vez, el Partido de la U logró obtener la mayor votación para las
elecciones a congreso de 2006 y 2010, y con su aliado natural, el Partido
Conservador consiguieron luego la mayoría
mínima en las cámaras.
Ahora bien, después, su coalición actual solo ha
dejado por fuera a la izquierda democrática representada en el PDA que por el desastre
en Bogotá ha perdido la confianza para realizar debates de control político
exitoso al Gobierno Santos, como lo hiciera con éxito en la era Uribe a través de sus capitanes Petro,
Robledo y Avellaneda, entre los más notorios y ruidosos en el mejor sentido.
La
participación política a la vista
El articulo 127 de la
Constitución Nacional y el artículo 48 de la ley 734 de 2002 Código
Disciplinario de los Servidores Públicos, prohíben la participación en política
de servidores públicos. Sin embargo, es vox populi, que el Presidente en la
Asamblea de la U, pronunció el discurso donde estuvo más al lado político y
electoral de su partido que una convención programática para definir políticas
nacionales exigidas a un gobierno por una colectividad política. Tal parece,
como es el Presidente, que Santos no tendrá sanción alguna al arrancar su
campaña a la reelección, como, en cambio, sí la tuvo el exgobernador Abadía,
inhabilitado por invitar a los alcaldes vallunos a respaldar a Andrés Felipe
Arias como precandidato presidencial.
A su vez, el Presidente
invitó a no respaldar los proyectos de reforma para autorizar vía
constitucional el cambio de partido ó la escisión del mismo, justificando que
debilitaría a su partido, La U.
En
la mañana y en la tarde: las apariciones
En la mañana, tuvimos el
discurso de Uribe, y en la tarde, el de Santos. Es un hábito permanente,
manifiesto, entre los dirigentes políticos y del partido de la U para evitar
una confrontación ideológica y de opiniones sobre el acontecer nacional. En lo
cual siguen siendo libero conservadores, y para nada democráticos. Ni se lo
sueñen.
Es así como se comportaron
en los ejercicios preliminares de la campaña para congreso y presidencia. Tales
fueron los casos del Encuentro de Líderes
del Suroeste Antioqueño, en Betulia, Uribe llegó en la mañana y Santos en la
tarde; en el Encuentro de Lideres del Occidente Antioqueño, en Santa fe de
Antioquia, Uribe en la mañana y Santos en la tarde y en la Asamblea del Partido
de la U, paso lo mismo.
Es
hora de la definición
Los Senadores y
Representantes a la Cámara, debe definir en cuál orilla estar, en la ideológica
con Álvaro Uribe Vélez, ó en la burocracia que maneja el presupuesto y los más
altos cargos del Estado para obtener votos, al lado presidencial.
A su vez, los diputados y
concejales deben tener un espacio real sobre la definición ideológica y del
futuro del Partido de la U, porque ellos son los representantes de las regiones
y municipios, son los que están en permanente contacto con sus comunidades y
militantes. Porque de participación no sabemos, ni los dirigentes “naturales”
quieren saber nada.
PD: ¿Acaso es malo que
exista oposición al Gobierno?, ¿Quién gobierna a los congresistas: su veto se
compra con burocracia y presupuesto nacional? ¿Qué diría George Tsebelis[2]
estudiando el caso colombiano?
[1]
Participante del Grupo Presidencialismo y Participación UNIJUS/COLCIENCIAS
[2]
Tsebelis, G. (2006). Jugadores con veto. Como funcionan las instituciones
políticas. México D.F: FCE